Números 3 y 4 de la colección Lobo Rampante

Un lúcido trabajo de contextualización ha realizado Carlos Manuel Valdés Dávila al manuscrito que aquí hemos titulado Gerónimo Camargo, indio coahuileño. Una crónica de vida y muerte cotidianas del siglo XVIII. Un área importante de los actuales Coahuila, Nuevo León, San Luis Potosí y Durango fue escenario de las correrías emprendidas por el indio Camargo y sus compañeros; estas aventuras quedan minuciosamente descritas en la declaración judicial que aquel indio rindió frente a sus captores. Asaltos, saqueos, matanzas y otros variados y trágicos hechos dan cuenta de la relación que guardaban los refractarios a la férula del colono español en el primer tercio del siglo XVIII. Documento que más parece una página literaria que un texto legal, Gerónimo Camargo... es un notable cuadro del entorno físico y espiritual de todos aquellos hombres que, sin metáfora, vencieron al norte mexicano.

Debido a su larga inedición, es de esperar que este Tríptico de Santa María de las Parras. Notas para su historia, geografía y política en tres documentos del siglo XVIII posibilite hoy, con su puesta en letra de molde, una mayor inteligencia de las circunstancias que convergieron para darle macizura a nuestra percepción del mundo material y espiritual característico del sur de Coahuila durante la Colonia. De paso queda planteada, junto a la transcripción íntegra de los manuscritos, la valía que puede tener el Tríptico... como fuente de primera mano en la que, de hecho y como lo propone la introducción del doctor Corona Páez, se basaron los testimonios que hasta el momento han sido considerados primigenios en materia de historia parrense, cuyo caso específico es el del Viaje de indios del franciscano Agustín de Morfi.

Los ensayos albergados en Vislumbre de cineastas no pecan de excesos eruditos ni mucho menos, de lirismo facilista. Los caracteriza el equilibrio entre la minuciosa busca de referencias -labor de investigadores bien nacidos- y la pasión al ponderar el talento de doce hombres y una mujer que han asumido la realización fílmica como medio de expresión totalizante. Son seguidas aquí las trayectorias de Hitchcock, Bergman, Buñuel, Kubrik, Malle, Gutiérrez Alea, Wenders y Almodóvar, entre otros. De cada uno, Miguel Baéz Durán señala, si los hay, ascensos y caídas, triunfos y desastres, como ocurre con el David Lynch que después del multimillonario tropiezo de Dunas se elevó a la económica grandeza de Terciopelo azul. Sinceridad, buen juicio, vigorosa información y prosa ágil son los ingredientes contenidos en las piezas que configuran Vislumbre de cineastas. Trece ensayos biofilmográficos.