e d i t o r i a l 

Acequias ha sido un espacio de reflexión para la comunidad de la UIA Laguna, pero 
no se ha contentado con eso aunque en sí mismo sea importante. Varias colabo-
raciones foráneas ofrecen testimonio de que nuestra revista siempre a querido extender su territorio de papel y su amistad al pensamiento de las mujeres y de los hombres que de alguna manera están vinculados al sistema UIA-ITESO. Junto con la calidad de los textos, ése es el único requisito que se pide para plasmar ideas en Acequias
      Dicho ánimo de apertura no se queda, sin embargo, en el solo ofrecimiento de estas páginas. Otros mecanismos se han habilitado para que Acequias estimule la reflexión y el deseo de escribir. Dos concursos el Agustín de Espinoza, s.j. y el Ser hombres y mujeres para los demás buscan que la invitación llegue a sitios distantes de la Comarca Lagunera con el propósito, hay que remarcarlo, de escuchar las voces pronunciadas en contextos distintos y estar en sintonía con los tiempos de globalidad que atravesamos. 
      En su tercera convocatoria, el certamen Agustín de Espinoza, s.j., amplía su zona de interés al plano internacional. De hecho, el tema para este 2001 se plantea con una interrogante que apunta hacia todas las direcciones del orbe: "¿Es posible una identidad regional dentro de la globalización?" He ahí, claramente, el afán de encontrar explicaciones a los grandes temas de la coyuntura, y es de esperar que muchos ensayistas acudan a la ponderación de ese tópico. 
      Por otro lado, el concurso Ser hombres y mujeres para los demás propone un tema de suyo interesante: "Pensamiento, vida y obra del padre Arrupe, s.j." Como sabemos, el padre Arrupe fue general de la Compañía de Jesús del 65 al 83, y se le recuerda como uno de los jesuitas más notables del siglo XX. Entre otras innumerables experiencias, el padre Arrupe presenció en Japón el estallido de la primera bomba atómica y participó en el socorro de las víctimas. Este tema se plantea para celebrar con justicia el Año del padre Arrupe. 
      Sea Acequias, pues, semilla de novedosas reflexiones y territorio donde pueden frutecer esas ideas. Conforme pase el tiempo, más contentos podremos estar ante la cosecha del pensamiento maduro y generoso que se cultiva dentro y fuera de la UIA Laguna.  

JAIME MUÑOZ VARGAS